La Red de Áreas Escasamente Pobladas del sur de Europa (SSPA) ha realizado una valoración positiva de la reunión con Pedro Sanchez para afrontar la despoblación, pero siguen pendientes de una estrategia del reto demográfico, de la implantación de medidas efectivas y que estén dotadas de presupuesto.
Valoran positivamente que un Presidente del Gobierno haya escuchado los planteamientos de los colectivos y entidades cercanas al problema, y sobre todo porque pudieron comprobar que los planteamientos de la sociedad civil van todos en la misma línea que viene demandado la Red SSPA desde hace tiempo, con pilares fundamentales como la necesidad de compromiso de todos los partidos políticos, de consenso social, de definir una estrategia a largo plazo, flexibilidad o graduación en la aplicación de las leyes, servicios básicos al alcance de todos los españoles, comunicaciones del siglo XXI terrestres y digitales, políticas que fomenten las oportunidades de desarrollo… en definitiva, los colectivos y entidades que participaron en la reunión plantearon las líneas estratégicas en las que viene trabajando las Islas y Tierras Altas de Escocia desde hace más de 50 años, y gracias a las cuales se ha conseguido un incremento de la población del 22% en ese territorio (mientras Escocia solo ha crecido un 2%).
También valoran positivamente que por parte de las organizaciones participantes hubo consenso en la necesidad de establecer una fiscalidad diferenciada en las áreas escasamente pobladas para conseguir que generen un desarrollo empresarial que cree empleo para nuevos pobladores. El informe de fiscalidad diferenciada de la Red SSPA ha valorado cuantitativamente el gran dinamismo económico que produciría y el reducido coste que supondría para las arcas del estado, demostrando que es viable y posible una medida que ya han tomado varios países que tienen una voluntad real de fomentar el desarrollo económico de zonas frágiles, como Francia, China o Reino Unido.
La Red SSPA vio en la reunión receptividad por parte del Presidente del Gobierno en funciones porque por fin la despoblación se plantea como una política transversal, al igual que otros grandes problemas del país como la Transición Ecológica o la Igualdad (de la que la despoblación es parte), y también porque parece que ya ha calado al más alto nivel el hecho de que para resolver el problema de la despoblación no se pueden seguir aplicando las mismas políticas cortoplacistas y parciales de siempre.